No es que el peque sea especialmente aficionado a la tele, más bien todo lo contrario. Pero bueno, Pocoyó ocupa un papel muy importante en nuestras/mi vida y quería que también apareciese en el blog!
Creo que sobra las palabras para explicar lo que le parecieron a Diego las primeras natillas de chocolate que comió! Ya se sabe, esto es todo herencia genética, del padre la afición golfística y de la madre...
Aquí tenemos a Dieguete con cara de pocos amigos en su primer día de piscina de este año. Fue en la piscina de Canal, donde fuimos con la prima Isabel.
Aquí tenemos a Diego con su juego de palos. Este fue un regalo mío para Oscar cuando yo aún estaba embarazada. Oscar ya se lo dio a Diego y como vereis por las fotos parece que el peque ha heredado la afición golfística de su padre. ¡Le encantan!